A mi viejo no se le puede regalar nada, porque en su vida se leyó todo y ahora la vista se le cansa, porque con la ropa es un quisquilloso de mierda, porque cualquier novedad le parece una boludez inútil y cualquier adornito o "gesto" te lo manda a meter por el orto. Sí, mi viejo no es tan normal como yo, y tiene bastante mala onda.
Después de que dejé esas edades en las que le hacíamos el regalo en el cole, sufrí una buena cantidad de temporadas de regalarle cosas que detestaba y jamás usaba (desde corbatas hasta "cremas para hombres" -ah, qué genial para salir del paso en otras ocasiones esto de que la cosmètica se gata generalizado- y varios etcèteras). Hasta que se compraron el dvd, y mis días del padre, cumpleaños y demás fechas regalonas dejaron de ser un carga.
A mi viejo no se le puede regalar nada, salvo pelis. Te acepta cuelquiera. Las que le gustan, las disfruta, las que no, las usa de somnífero a la hora de dormir. Esto no es algo que descubrí hace no mucho. Al principio me esforzaba por encontrarle algún clásico que le gustara. Pero cuando madre me tiró el dato de como usaba Titanic (una de las pocas pelis que ella puede resistir callada hasta el final) para quedarse dormido... empecé a completar mi dvdteca...
Al final era cierto. El mejor regalo que una puede hacer es regalar lo que a una le gustaría recibir...
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3 comentarios:
Mi padre es algo parecido. Si le regalo una camisa YSL, durará una semana sin que la enchastre con tinta china o algo; tiene toda la música que quiere; no toma vino y detesta los adornos. Así que se achica la lista: libros o flores. Mi padre es de los pocos hombres que realmente disfrutamos si nos regalan flores.
No hay que regalar nada.
No más nada.
No sé, chicos... Padre... ni libros (eso seguro!!) ni flores... pero nada... qué sé yo, no es normal no regalar nada...
;)
Gracias por venir (son los primeros!), bienvenidos.
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